jueves, 15 de noviembre de 2012

La Epopeya de Gilgamesh (Cultura Mesopotámica)

Por Fabiana Ordoñez

     Hace cinco mil años, un rey llamado Gilgamesh gobernó la ciudad mesopotámica de Uruk. Pronto se convirtió en héroe y dios, y sus gestas lo hicieron protagonista de la primera epopeya de la historia, centrada en su desesperada búsqueda de la inmortalidad. En ella aparece, por primera vez, el tema del diluvio universal.

      En lo que hoy es Irak, se extendía la fértil llanura mesopotámica, atravesada por los ríos Éufrates y Tigris. En el sur de esa llanura, en el país de Sumer, se levantaba la imponente Uruk (la actual Warka), cuna de su todopoderoso rey Gilgamesh. El, gobernaba Uruk jactándose de todo el poder que poseía, abusaba de mujeres y le hacia males a las personas, como era un semidios, la gente le temía, y nadie se atrevía a oponérsele. Hasta que un día el dios Anu, junto con otros dioses hicieron un consenso y llegaron al acuerdo de crear un semidios tan fuerte y alto como el, siendo así su polo opuesto. Su nombre era Enkidu, creado del barro, tan hábil como el propio Gilgamesh para enfrentarlo y que este se percate de que no es invencible. El propósito de los dioses con Enkidu era que unieran fuerzas para luego matar a Gilgamesh.
Enkidu vivía en la selva cual primitivo. Un día, un pastor estaba con todas sus ovejas y un animal quería comérselas, entonces Enkidu se mostró por primera vez, rescatando las ovejas del pastor, este se fue corriendo a hablar con Gilgamesh, a decirle que existe un hombre tan alto y fuerte como el, la reacción de Glgamesh fue querer matarlo, nadie podía ser tan fuerte como el, tan poderoso. 
Los dioses envían a una mujer para civilizar a Enkidu, era una "prostituta sagrada" llamada La alegre. Tuvieron relaciones y ella lo civilizo. Empieza una batalla entre Gilgamesh  Enkidu, su propósito era pelear sin embargo terminaron reinando juntos en Uruk. Gilgamesh buscaba la mortalidad hasta que conoció a Enkidu. Gobernaban juntos en paz hasta que un día una dios llamada Istar apareció en la ciudad de Uruk con el propósito de casarse con Gilgamesh, pero este no quiere, no la acepta. Y es entonces cuando Istar le manda un castigo, un toro celestial Enkidu y Gilgamesh luchan contra el toro incansablemente y Enkidu muere.
Los dioses estaban descontentos ya que habían creado a Enkidu para guiar a Gilgamesh. 
Gilgamesh se encontraba perdido... fue en busca de Enkidu en los desiertos más peligrosos, lucho contra bestias y escorpiones.